Este entrante es ideal para las fiestas que se aproximan. Es una receta que aprendí hace años de la madre de mi gran amiga Patri de Osuna. Últimamente la tenía algo olvidada pero la he vuelto a hacer y he recordado lo rica que está y lo fácil que resulta hacer. Puedes rellenarla de otros ingredientes y queda genial: nueces, queso azul, salmón, palitos de cangrejo...
INGREDIENTES
- 2 PECHUGAS DE POLLO ABIERTAS
- 6 LONCHAS DE JAMÓN
- 6 LONCHAS DE QUESO
PREPARACIÓN
1. Le pedimos al carnicero que nos abra las pechugas y las golpeamos con un mortero sobre una tabla. Así conseguimos que la pechuga sea más fina y quitarle las irregularidades.
2. Echamos jamón serrano y lonchas de queso, en mi caso. Podéis echar los ingredientes que queráis: queso azul, nueces, sobrasada, queso para untar, salmón, palitos de cangrejo, gulas, pasas...
3. Vamos haciendo un rollo con la pechuga y los ingredientes que hemos seleccionado.
4. Envolverlo con papel de aluminio y poner un recipiente con agua para hervir. Cuando hierva echar las pechugas envueltas en papel de aluminio y dejarlas unos 10 minutos.
5. Quitar el aluminio y refrigerar. Cortamos en rodajas y servimos con alguna salsa: mayonesa, yogur... Ideal como aperitivo, empiezas y no puedes parar. La presentación es muy buena con lo que quedaréis genial en cenas o comidas con amigos o familia. Mi experiencia es que a todo el mundo le suele gustar tanto a niños como a mayores.
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